El secreto de mi éxito
Vive tu espiritualidad. Hazlo en lo cotidiano, en lo simple, en medio de tu rutina. Vivir tu espiritualidad representa la oportunidad de estar conectado de manera constante con la fuente divina que nos da provisión, sabiduría, ánimo, fortaleza, esperanza, guía y mucho más.
¿Por dónde empezar?
En el momento que te subes apurado a tu carro y empiezas a manejar, sonríe y dale gracias a Dios por haberte despertado hoy. Mientras esperas en la fila, observa a tu alrededor a todos y reconócelos como hijos del mismo Padre. Lleva tu mirada al cielo más seguido, contempla las nubes, las aves, el sol, la luna y las estrellas y da el reconocimiento
al creador de todo lo que embellece el mundo que habitas.
Entrenarnos espiritualmente desde lo simple y lo cotidiano, es el primer paso para aprender a ver la abundancia que habita en todo, es el preámbulo para vivir en el asombro constante y la gratitud desbordada.
Recuerda que antes de cualquier negocio u objetivo, lo más importante es el estado de quien va a ejecutar el plan.
Te debo confesar que el secreto de mi éxito personal y profesional, ha sido el poner a Dios delante de cada plan, objetivo y decisión, al final es Él quien cuando activa un sueño en ti, es porque te dará las herramientas para convertirlo en realidad.